LA HISTORIA DE HANUKKAH Y NUESTRA HISTORIA

Se necesita mucha valentía para reconstruir, restaurar y dar vida a algo que aparentemente se ha dejado morir. Entre la asimilación, la apatía y el miedo, muchos alrededor de los Macabeos no estaban interesados ​​en hacer lo necesario para pelear la batalla, defender la Torá y permanecer fieles a la responsabilidad del pacto. En otras palabras, no fue tarea fácil para los Macabeos y no necesariamente contaban con el apoyo de la mayoría.

En estos tiempos, muchos estamos regresando a las sendas antiguas y tenemos también la misión de restaurar algo que se ha perdido, algo olvidado, destruido y contaminado. Estamos regresando a la comprensión de la Torá y su relevancia continua, de compartir a Yeshua como el Mesías de Israel, de la continua centralidad de Israel y el gozo de las Fiestas del Señor.

Estos fueron una vez bien conocidos y practicados entre los discípulos de Yeshua, pero el paso del tiempo y las circunstancias históricas cambiaron y contaminaron ese entendimiento.

El SEÑOR habló por medio de Jeremías con estas palabras muy apropiadas para estos tiempos:

“Párate junto a los caminos y mira y pregunta por los senderos antiguos, donde está el buen camino; y anden en él, y encuentren descanso para sus almas”. (Jeremías 6:16)

Los senderos antiguos pueden ocultarse, sin embargo, su dedicación para reconstruirlos, redescubrirlos, compartirlos y restaurar el entusiasmo por la plenitud del Eterno y el evangelio de Yeshua debe ser la meta de cada creyente.

Que el recordatorio de los eventos de Hanukkah nos hagan reflexionar y nos inspiren en el camino y la obra de restaurar el reino.

• Tomado de estudio de FFOZ